
Bienestar mental y enfermedad mental son parte de un continuo en el que las personas pueden encontrarse a lo largo de su vida. La Organización Mundial de la Salud (OMS) define la salud mental como un estado de bienestar en el cual la persona es consciente de sus propias capacidades, puede afrontar las tensiones normales de la vida, puede trabajar de forma productiva y fructífera y es capaz de hacer una contribución a su comunidad.